Con motivo de los días mundiales de Alzheimer (21/09) y envejecimiento activo (01/10), el Ayuntamiento de Madrid La Nave, acogerá las «I JORNADAS SALUD Y BIENESTAR; MENTE ACTIVA, VIDA PLENA» los próximos 12 y 13 de octubre, en dónde un equipo de expertos en mindfulness y su aplicación clínica, darán las claves para promover una mente activa y generar así, hábitos de vida saludables, reduciendo el riesgo de padecer deterioro cognitivo, tal y cómo indican los ODS 3 Objetivos Desarrollo Sostenible; Salud y Bienestar
Para ello, según nos dicen los profesionales sanitarios, primero debemos de entender que comenzamos a envejecer desde el primer día que nacemos, nuestras células, nuestra piel y nuestro cuerpo se va deteriorando, desgastando y renovando día a día, por esta razón, no debemos dejar para los últimos años de nuestro ciclo vital, buenas prácticas que fortalezcan una buena salud física, emocional y social.
Y es que según la OMS, el número de personas que padecerán demencia se triplicará dentro de 30 años, tal y como citan textualmente en un comunicado de prensa en diciembre del 2017.
La comunidad científica, centros de referencia en I+D, fundaciones como Pascual Maragall y Reina Sofía están realizando un trabajo pionero para combatir y dar soluciones específicas a pacientes y familiares, pero nos advierten que la mejor estrategia para prevenir el Alzheimer, es la de tener hábitos de vida saludable.
Así lo expone en un comunicado de prensa del año 2017, la Sociedad Española de Neurología en dónde cita textualmente, que más del 40% de esta patología, podría revertirse generando hábitos de vida saludable y realizado ejercicios cognitivos.
El Doctor en Psicología Clínica, Domingo Quintana y José Luis Reig, Presidente del «I Congreso Internacional Mindfulness y Alzheimer» han diseñado estas primeras jornadas, con el objetivo principal de generar hábitos de vida saludable, mediante sencillos ejercicios cognitivo-conductuales basados en atención plena, o también llamado «mindfulness» para dar una solución específica y con rigor clínico, a un segmento de la población de más de 65 años, que será del 34% para el año 2066